Isabel Allende Bussi se pronuncia tras el intento fallido de adquirir la casa de su padre: “Nuestra familia siempre ha estado alejada de los conflictos de intereses” | EL PAÍS Chile

La senadora socialista Isabel Allende Bussi se pronunció este miércoles en el Congreso Nacional de Valparaíso sobre la polémica generada en Chile tras la decisión del Gobierno de no proceder con la compra de la casa de su padre, el expresidente Salvador Allende (1970-1973), que tenía como objetivo transformarla en un museo, por la cual se habría desembolsado 933 millones de pesos (aproximadamente 922.000 dólares). La adquisición no se llevó a cabo debido a un obstáculo legal y constitucional que la Administración de izquierda no había contemplado, dado que tanto la parlamentaria como la ministra de Defensa, Maya Fernández Allende, nieta del líder de la Unidad Popular, son copropietarias del inmueble. “Nunca esta familia se ha visto involucrada en negocios, conflictos de intereses, beneficios ocultos, negociaciones turbias, ni en ninguna otra práctica cuestionable. Tenemos una dignidad que ha sido reconocida tanto aquí como en el extranjero”, afirmó la senadora, pocas horas después de que la bancada de diputados del Partido Republicano, de extrema derecha, anunciara que recurrirá al Tribunal Constitucional para que tanto ella como Fernández sean destituidas de sus cargos, argumentando que sus funciones les otorgan inhabilidades para firmar contratos con el Estado.

La Administración de Gabriel Boric desistió el pasado viernes de la compra de la casa, ubicada en la calle Guardia Vieja, en el municipio de Providencia, en el sector oriente de Santiago, y lo hizo solo tres días después de que anunciara su proyecto patrimonial. Fue un anuncio que realizó ministerio de Bienes Nacionales que, en un comunicado, señaló que “como parte de este proceso, y debido a la actual estructura de copropiedad de la comunidad de herederos del expresidente Allende, se ha determinado que no es posible concretar la adquisición de la residencia del exmandatario”. Sin embargo, la controversia no paró y este lunes Boric pidió la renuncia de la ministra a cargo de esa cartera, Marcela Sandoval.

Allende adquirió la casa en 1953 junto a su esposa Hortensia Bussi, y vivieron allí hasta 1971. Era conocida como La Moneda chica debido a los diversos encuentros políticos que realizaba el expresidente socialista, derrocado el 11 de septiembre de 1973 tras el golpe de Estado que lideró el exdictador Augusto Pinochet (1973-1990). Actualmente, la propiedad pertenece a sus dos nietos, la ministra de Defensa y su hermano Alejandro; y a sus dos hijas Isabel y Carmen Paz Allende Bussi.